Creo que es tarde para deletrear tantas cosas que veo en mi vida rutinaria, veré que sin saber que es lo que exactamente compone la energía a cada instante viviré mareado y distraído de todas aquellas discrepancias a las que trato de ponerles atención pero que básicamente no escuchan el llamado de mis gritos.
Esta noche, quiero que las cosas sigan un camino diferente, mas bien, quiero que todo se detenga y me de la oportunidad de vivir el día de mañana como si fuera hoy, pues aunque no descubro lo que me dices si me doy cuenta de lo que haces, permiteme decir que es eso lo que me confunde, el hecho de mentir de manera momentánea y el hecho de fingir de forma duradera es algo confuso y meramente diferente a lo que una vez dije que estaba acostumbrado a hacer.
Antes de escapar quiero ser capaz de esclarecer las diferencias entre mi conocimiento y mi habilidad, si bien, mi palabra escrita no es lo suficientemente maravillosa por lo menos que sea lo alcanzable a los ojos de lo imposible, así esta carta que mis dedos escriben de una manera poco confiable, sera mas perfecta a lo que creíamos y a lo que seguramente volverá a ser en esta noche de cantos a la luna, viejos resplandores y esperanzas danzantes.
Mirare por ultima vez aquel horizonte que ve el inicio de todo y descubre la indiferencia de la nada, no seas tan culpable de tus acciones, yo también quiero ser parte de tus errores, ahora señor de las dudas, ábreme el camino de la senda que debo ser capaz de recorrer, pues si me ven cuando paso por las calles no soy un ser mas que despreciado por otros por no ser como ellos.
Esta carta no tiene destinatario, solo es para aquellos que sean capaces de leer con el alma, sentir con los dedos y vivir sin el aire que respiramos a cada paso, ahora sera despreciada esta idea y después sera duradera la que una vez vi a lo lejos, pensare que las olas son mas cortas a la luz de la luna que en las sombras en las que no encuentro nada de lo que puedo estar diciendo.
Caminare por montañas escapando de mis enemigos solo para golpear los limites de mi propia ineptitud, y todos en cambio estarán felices al saber que ese cero a la izquierda es para aquellos que quieren apoyo aun cuando no saben cual es el limite del mismo hacia otros para con ellos.
Secretamente me iré y tal vez no regrese, secretamente amare aunque tal vez no lo diga, secretamente desapareceré y seré olvidado, porque soy el viento y el nunca es recordado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario