No hay nada que
hablar nada que pensar solo queda el impulso de seguir, cada momento que se
pierde me deja continuar por ti y todo ese es perfecto de ver, puedes soñar como
algo igual, dime porque es de día en la noche como puedo cambiar y todo mostrar,
no lo se bien, pero creo que es por amor, esta sensación que enloquece.
Cada paciencia es
un error, prométeme que al cambiar todo seguirá igual pues no espero perderte
de día o noche pues sea como sea estará bien, excepto que no se te olvidar
compartimos nada y eso lo se, te tuve que ver entre la población pero solo
fuiste tu la que mostro verme a mi con calma y eso lo se.
Ahora te alejo,
nunca te acerco, espera y veras, si te amo, si me amas, una vez dijimos lo que
significábamos para el otro y eso fue hace tan poco que ya no lo recuerdo y tal
vez tu tampoco, así que espera y muéstrame porque si estábamos tan bien hemos
cambiado.
Créeme que no se
la profundidad de la noche pero al menos se que las sombras caen mientras el
sol brilla en la misma calidad de momentos incomprendidos, así que prométeme irte
y no volver a menos que estés dispuesta a decir que el rencor no es parte de mi
cualidades de individuo.
Así que antes de que sea demasiado pronto y demasiado lejos, estaremos aquí de nuevo, para saber si lo que una vez fue conocido se vuelve incierto y lo que una vez fue diferente se vuelve aburrido y cotidiano.
Mañana deberás de
hacerme caso y olvidar que has hablado conmigo al menos que estés dispuesta a
escapar a las montañas y decirles al oído que has pasado de estar aquí a vivir
donde quiera que estoy y esperando a que la sociedad nos pierda de su mirada y
nos deje cautivar por lo que sabemos que ha desaparecido en el tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario